Conocer el ciclo de Bactrocera oleae para ser más eficaz
Bactrocera oleae o mosca del olivo suele pasar los meses de mayor frío del año en la tierra bajo los olivos en forma de pupa. Dependiendo de la zona, durante los meses de marzo, abril y mayo se produce la emergencia de los adultos. Desde el suelo, vuelan y, tras producirse la fecundación y una vez los frutos son receptivos, las hembras ponen sus huevos bajo la piel de las aceitunas realizando una pequeña herida con su ovipositor. Sobre esta herida puede producirse el famoso “escudete” que es una infección fúngica producida por una parasitoide (Lasioptera berlesiana) de la larva de la mosca.
El huevo tiene un período de incubación de 2-3 días en verano hasta más de 10 en otoño. La larva madura puede alcanzar 6 y 7 mm de longitud, con la eclosión del adulto se inicia una nueva generación de la mosca, pudiendo llegar a completar hasta 4 generaciones al año.
Cuando las larvas completan su ciclo realizan la pupación en el terreno, que suele coincidir con la época invernal, para finalmente eclosionar los adultos con el aumento de temperaturas y humedades en primavera. Los adultos, que realizan la mayoría de su actividad en superficie, copulan y realizan la puesta de huevos de nuevo en el terreno en un periodo comprendido desde marzo a julio.
Daños en el cultivo
La mosca del olivo es la plaga más importante en el olivar español y mediterráneo, sobre todo en zonas endémicas, junto a Prays oleae. Los daños más importantes se concentran en zonas con humedades relativas elevadas y temperaturas suaves durante los meses de verano y otoño.
En cualquier caso, los momentos más problemáticos de la plaga son desde inicios de verano hasta comienzos o mediados de otoño sobre la pulpa del fruto, haciendo galerías y finalmente provocando grandes orificios de salida, causando pérdidas de cosecha y disminución de la calidad del aceite por varios motivos (caída prematura, pérdidas de peso del fruto, “escudete”, producción de hongos, aumento de peróxidos, acidificación, etc.). Esto finalmente se traduce en una pérdida económica para el agricultor.
¿Cómo combatir eficazmente Bactrocera oleae con control biológico?
Dado al aumento de restricciones en el uso de productos de síntesis química para el control de la mosca del olivo, y al incremento de los fenómenos de resistencia de la mosca del olivo a algunos insecticidas, BIOGARD® organizó un Webinar.
En él se abordaron nuevas estrategias para el control de la plaga de la Bactrocera oleae basadas en el uso de Naturalis®, Beauveria bassiana cepa ATCC 74040 y ROIKAL®, caolín calcinado. Puedes acceder a todo el contenido del webinar al final de este artículo.
¿Qué productos ofrece BIOGARD® para la mosca del olivo?
Naturalis® es un insecticida-acaricida biológico registrado en olivar, basado en el hongo entomopatógeno Beauveria bassiana cepa ATCC 74040. Está exento de LMR y no tiene Plazo de Seguridad en el cultivo. Representa una solución eficaz para el control de la plaga del olivo en cultivo convencional y ecológico.
Roikal® es un potenciador de las defensas de la planta basado en caolín calcinado de alta calidad, con una concentración de 100% peso/peso. Se trata de un producto de origen natural que mejora la resistencia de las plantas al estrés biótico y abiótico. Se utiliza para prevenir las quemaduras en los frutos, los efectos provocados por el estrés térmico y para limitar la acción de algunos insectos.
Webinar: Estrategia de control de Bactrocera oleae, mosca del olivo
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